La reina de los condenados (#3 Crónicas Vampíricas) de Anne Rice

Título original: The Queen of the Damned
Autor: Anne Rice
Serie: Crónicas Vampíricas
Género: Terror, fantástico-gótico
Editorial: Zeta Bolsillo
Primera edición: marzo 2009

En Lestat, el vampiro habíamos dejado a nuestro vampiro rockero cuando cerraba sus ojos para dormir antes de la llegada del alba, perturbado por una presencia extraña, pero que fácilmente relacionamos con Akasha.

¡Oh, por favor, querida mía, hermosa mía, por favor! Deseé decirlo, pero los ojos se me cerraban de nuevo. Mis labios no se movían. Estaba perdiendo la conciencia. Fuera, el sol había salido.

En esta continuación, Anne Rice cambiará su metodología de narrar desde la visión de uno de los personajes (Louis en Entrevista con el vampiro y Lestat en Lestat, el vampiro), para hacer un copilado de historias desde la vista de humanos y vampiros con diferente orden cronológico. Lo que hace que a veces se tenga la ilusión de que la novela no avanza. Sin embargo, la riqueza de los personajes, en especial los vampiros de la Primera Generación y la historia de Armand, entretienen y desenvuelven más la trama. 

Cada comienzo de sección, posee un poema de Stan Rice, quien fue esposo de Anne. Estos poemas, un tanto oscuros, le dan un toque especial a la novela.

i.
Alas remueven el polvo iluminado por el sol
de la catedral donde
el Pasado está enterrado
en mármol hasta el mentón.
Stan Rice. De "Poema al meterse en la cama:amargura". Cuerpo de Trabajo (1983)

 Akasha ha despertado de su sueño y ha tomado la vida de Enkil. Marius horrorizado por el hecho, es atacado por Akasha, quien lo sepulta en el hielo. Desde allí Marius enviaba mensajes telepáticos a todos los vampiros acerca del peligro. Lestat no llega a oírlo a tiempo y es raptado por la Reina. Ella había estado incendiando a la mayoría de los vampiros neófitos y a algunos viejos que no le servían para su plan. Oh, si, tiene un plan para con la humanidad.

Dentro del concierto, un nuevo personaje misterioso, Khayman, se encuentra con Armand y su hijo Daniel, recién convertido en vampiro, quien es el reportero de Entrevista con el vampiro. También se encuentra con Mael, un nuevo, y no tanto, personaje que es seguidor de Maharet, de quien hablaremos más adelante, que estaba allí en busca de Jesse, pariente de Maharet y miembro de la Talamasca. Jesse, como humana, posee poderes únicos: puede ver y hablar con los fantasmas y leer la mente de la gente. Es por esta razón que será convocada por la Talamasca, un organismo secreto que se dedica a investigar a los seres sobrenaturales, entre ellos los fantasmas y los vampiros. Jesse quien tiene los recuerdos de su estancia con Maharet y Mael un poco fragmentados, no cree en los vampiros, hasta que ve el fantasma de Claudia en Nueva Orleans. Debido a este descubrimiento, se obsesionará con los vampiros e irá al concierto de Lestat para averiguar si son verdaderos. Luego de subir al escenario y tocarlo, ella quedará convencida. Pero al irse será atacada por un vampiro, que le romperá el cuello. Mael la recoge y la lleva a la casa de Maharet, donde se proponía convertirla en uno de ellos, pero fue Maharet quien finalmente llevó acabo el ritual.

Khayman ve como Akasha se lleva a Lestat, quien estaba dormido, hacia los cielos. Y luego, guia a Gabrielle y a Louis, junto con Armand y Daniel, hacia la casa de Maharet. Desde hace un par de días, la población vampírica estaba siendo asediada por unos sueños donde aparecían unas gemelas pelirrojas quienes sufrieron grandes ofensas. Una de estas gemelas es Maharet, quien en presencia de Khayman, Gabrielle, Louis, Armand, Daniel, Marius (que fue rescatado del hielo), Pandora, Santino, Eric, Mael y Jesse, contará su historia y el origen de los vampiros. Mientras, Lestat presencia como Akasha lleva adelante su plan: exterminar el noventa por ciento de la población masculina del mundo, con el fin de asegurar así la paz para la humanidad, convirtiéndose, a su vez, en nuestra diosa.

Ya no tenía miedo de caer; ya no tenía miedo de nada tan insignificante. Porque mi alma entera (mezquina como era y como siempre había sido) sabía de miedos que yo nunca habría imaginado.

Escenas sangrientas y desalmadas llevarán a un final explosivo. Lestat nos muestra su miedo por Akasha, nuestros queridos vampiros se preparan para su segura muerte y una presencia salvaje camina para encontrarlos. Sin duda, esta novela supera a las dos anteriores y le da un nuevo significado al mito.