¡2.000 Seguidores!

¡Muchas gracias!

Sé que he dicho esto miles de veces, pero realmente lo siento. Cada vez que llego a casa, luego de una jornada agotadora de trabajo y estudio, con muchos problemas a la espalda y dolores de cabeza, y me siento a escribir algo en el blog... es como si se abriera un espacio especial, una barrera altísima que aleja de mí todo tipo de preocupación. Esto es lo que amo: leer, escribir y estar rodeada de ustedes, personas que comparten mi loca pasión por los libros.

Cuando abrí el blog, lo hice más por impulso que por proyecto. No lo visualizaba como algo que pudiera salir airoso por mucho tiempo. Quería simplemente expresarme, lograr un momento para mí.

Pero me entusiasmé, comenzaron a seguirme, leerme y comentarme personas que no conocía, que no sabía de dónde habían salido. Así que comencé a investigar qué era realmente tener un blog. cómo se hacía una reseña y qué había que hacer para tener un buen blog de literatura. Cometí errores, destrocé más de una imagen y plantilla, borré y volví a poner secciones, inventé y fracasé. Pero siempre estuvieron ustedes ahí, apoyándome y dándome consejos. Salí adelante.

Realicé mi primer concurso y no participó casi nadie. Pero fue una experiencia gratificante, cuando recibí los emails de los ganadores... No tengo palabras para explicarles, fue mi primer contacto directo con lectores de otros países.

A los seis meses, una editorial me contactó por email... Con un mensaje extraño que casi me mata del susto: una tal "Helen no puede dormir" y allí empezó mi andanzas con el mundo editorial, que se fue dando de apoco, pero que hoy en día fluye amigablemente.

Cumplí un año y lo festejé a lo grande. No se los dije, pero ese año tenía pensado cerrar el blog. Quería dejarlo en Año Nuevo. Pensé que mi tiempo estaba cumplido. Se lo conté a una amiga (una no lectora) y me dijo que estaba loca, que siguiera hasta que ya nadie me leyera. Así que continué.

A mitad de este año mi vida se sacudió. Cambié, cambió el blog, cambió mi casa, cambió mi familia. La vida te sorprende, el destino es tozudo y la suerte es histérica. Fue algo terrible que no tiene sentido que les cuente, no quiero causarles lástima. Tener el blog fue mi salvación, me aferré a los libros, a los comentarios y a los grupos de Facebook. Fui a reuniones, disfruté adaptaciones y pasé el tiempo con lectores. Siempre con una sonrisa, seguramente nadie pensó que la estaba pasando mal. Y es que cuando estoy con los libros, mi vida es maravillosa. Por eso estoy aquí escribiéndoles esta noche, después de uno de los peores días de mi corta vida.

Porque el blog llegó a los dos mil seguidores y porque ustedes son los que me dan el aliento para que siga adelante... Para que siga leyendo, para que siga escribiendo, para que siga, simplemente. Muchas gracias.