Rafaela de Mariana Furiasse

martes, 30 de diciembre de 2014


Rafaela tiene 16 años y es gorda, a diferencia de su madre y de su hermana Aitana, que parecen modelos. Además es tímida, y en su curso se siente “invisible” ante todos, salvo para unas pocas amigas. Un día se cae por las escaleras de la escuela, pierde un aro… y encuentra a Simón. Pero los prejuicios no son fáciles de desterrar cuando se tienen 16 años. Así se pone de manifiesto la experiencia de sentirse diferente en un mundo-espejo obligado a devolver imágenes idénticas a los jóvenes de hoy. La escritura refleja una subjetividad en la que se conjugan dos tipos textuales: el diario íntimo y el e-mail. Obra ganadora del premio El Barco de Vapor 2002.




Libro único
Datos adicionales:
Ya a la venta
Ediciones SM
El Barco de Vapor
128 páginas

Sobre la autora:


Mariana Furiasse nació en Rosario, 1976. Actualmente vive en Buenos Aires. Se licenció en Historia y en Letras.
Rafaela me ha gustado y no me ha gustado. Esta novela está narrada en primera persona, por la protagonista, con el estilo propio del diario íntimo; y a excepción de unos cuantos emails que rompen con el hilo, la historia se va desarrollando bajo las palabras y sentimientos de la chica, lo cual no me agradó, ya que me pareció excesiva la histeria contenida.

Rafaela es gorda y todos los problemas que tiene giran alrededor de eso. Y nada más. Realmente me esperaba algo acerca de su padre, su madre o alguna evolución. Lo único en lo que avanza la novela es acerca de su hermana y Simón. Eso me defraudó un poco, pero solo fue cuando terminé de leerla que me di cuenta de la falta.

¿Es tan terrible ser gordo? Rafaela nos cuenta su versión de los hechos, lo lastimada que se siente cuando su familia la juzga, cuando tipos que no conoce se burlan de su aspecto, cuando es agredida por algo que no puede controlar. ¿Hay que vivir haciendo dieta? ¿Hay que vivir en un gimnasio? ¿Hay que ser del cuerpo un culto? A pesar de que la novela promete una reflexión al respecto, se queda en lo superficial. Tal vez por ser pensada para los lectores jóvenes no se ha querido profundizar demasiado...

Había mucho más para decir al respecto, pero todo se quedo en el tintero. Se podría haber jugado mucho con la figura desaparecida del padre, con la imagen de madre modelo, con la hermana perfecta, con un romance en ascuas y con una protagonista con baja autoestima que nos lleva a un final extraño.

Abierto, sí. Me gusta pensar algo dramático al respecto. Allí, en el último párrafo algo realmente jugado hubiera hecho que cambiara de parecer con respecto al resto. Pero como en las ciento de páginas anteriores, la novela se autoanula. Una pena, ya que el estilo de la autora me parece muy bueno y disfruté enormemente su anterior novela, Ramona revelada.

Sin más que agregar, Rafaela era una novela prometedora, que me enganchó por su sinopsis, pero que me fue perdiendo a medida que las páginas pasaban. Sin reflexión alguna, me quedo con una sensación de vacío.


Gracias a la Editorial por la Oportunidad de Leer este Ejemplar.

1 comentario:

  1. El libro no lo lei, pero si me parece que las personas (y mas las chicas de 16 años, de quienes se espera mucho) sufren por ser godas y se atormentan cada dia respecto a eso. Para quien lo vive si, es tan terrible ser gorda.

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