Flora Célestine Thérèse Henriette Tristán Moscoso (7 de abril de 1803 - 14 de noviembre de 1844) fue una escritora y pensadora feminista francesa de ascendencia peruana. Fue una de las grandes fundadoras del feminismo moderno.
Su padre, Mariano Tristán y Moscoso, fue un aristócrata y coronel peruano natural de Arequipa (en ese entonces parte del Virreinato del Perú) y miembro de la Armada española, y su madre, Anne-Pierre Laisnay, francesa. Sus padres se conocieron en Bilbao (España). Éste no llegó a reconocer legalmente a Flora.
Tuvo una primera infancia de lujo, y su casa era visitada por personajes que luego serían hitos en la historia como Simón Bolívar. Además se dice que Bolívar podría ser su padre biológico, dado que se enamoró de su madre. Esta situación de bondad económica y social se truncó con el deceso de su padre en 1807, cuando Flora apenas tenía 4 años, lo cual dejó a la familia en la pobreza. La falta de reconocimiento legal por parte del padre le impidió recobrar los bienes que dejara éste.
Por este motivo, Flora,vive penosamente en el campo hasta los quince años de edad, y luego se traslada con su madre a uno de los barrios más pobres de París. Comienza a trabajar como obrera en un taller de litografía y con apenas 17 años, se casa con el propietario de ésta, André Chazal, y tiene tres hijos, uno de los cuales muere al parecer muy tierno; el otro se llama Ernest, y la tercera, nacida en 1825, es Aline, quien será la futura madre del pintor Paul Gauguin. Este matrimonio de conveniencia se disolvió a causa de los celos y malos tratos del esposo. Flora huye del hogar llevándose a sus hijos. Su doble condición de hija natural y esposa separada la redujo a la marginal condición de paria, como le gustaba autodenominarse. Chazal la persigue incansablemente. Finalmente, logra un acuerdo judicial con Flora, por el cual se queda con el hijo varón, mientras ella retiene a la niña.
No obstante, Flora desconfía de su marido y se marcha de París. Comienza su vida errabunda junto con su hija Aline. Gracias a la intervención del capitán Chabrié, en 1829 pudo remitir una carta a su tío Juan Pío Tristán y Moscoso que vivía en Perú, el cual durante cinco años le envía dinero para ayudarla en su pobreza. Gracias a Pedro Mariano de Goyeneche, pariente de los Tristán, Flora viaja a Perú en 1832, dispuesta a cobrar su herencia y recuperar un puesto digno en la sociedad. El 7 de abril de 1833, justo el día que cumplió 30 años, Flora se embarca en Le Mexican. El barco pertenecía al mismo capitán Chabrié, quien le había facilitado el primer contacto con sus parientes peruanos. La travesía hasta el Perú dura cinco meses, y tras desembarcar en Islay, Flora pasa a Arequipa, donde permanece hasta abril de 1834. Reclama a don Pío la herencia paterna, pero éste se niega a darle; ciertamente Pío la trata de sobrina querida pero al no haber ningún documento que acreditara que era hija legítima de su hermano Mariano, no podía proceder de otro modo. Únicamente accede a pasarle una pensión mensual.
Flora se traslada a Lima, donde permanece hasta el 16 de julio de 1834, fecha en que se embarca en el Callao con destino a Liverpool. Durante su estadía en Perú fue testigo de la crisis política de 1833-34, la guerra civil entre los partidarios de Agustín Gamarra y los de Luis de Orbegoso.
Flora escribió un diario de viajes acerca de sus experiencias en el Perú. El diario fue publicado en 1838 como Pérégrinations d'une paria (Peregrinaciones de una paria), del cual se reduce Mi vida, obra reseñada en este blog.
De regreso a Francia, emprende una campaña a favor de la emancipación de la mujer, los derechos de los trabajadores y en contra de la pena de muerte. Ya había conseguido la separación legal de su marido y la custodia de sus hijos; sin embargo, André Chazal, enfurecido e impotente, intenta asesinarla, disparándole en la calle y dejándola malherida, en septiembre de 1838. Flora gana notoriedad en la prensa, y Chazal es sometido a proceso que se le complica con la acusación de intentar violar a su propia hija Aline; finalmente es condenado a 20 años de trabajos forzados.
Separada ya de Chazal, Flora publica en 1840 un coherente programa socialista en L’Union Ouvrière (La Unión Obrera), en donde clama por la necesidad de los trabajadores de organizarse y aboga por su unidad universal; siendo la creadora de la consigna Proletarios del mundo, uníos. Se convierte así en la primera mujer en hablar del socialismo y de la lucha de los proletarios. Karl Marx le reconoció su carácter de precursora de altos ideales nobles.
Muere a los 41 años, víctima del tifus, mientras se hallaba en plena gira al interior de Francia promoviendo sus revolucionarias ideas.
Biografia de http://es.wikipedia.org/
si me ayudo mucho esta tarea
ResponderBorrarGenial =)
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