El libro debe su nombre a Wilfrid M. Voynich, un bibliófilo lituano que lo compró en 1912. Se supone que fue escrito en Italia, entre los años 1400 y 1438. Mide 23 x 16 centímetros y tiene 240 páginas. Junto al texto, se pueden observar imágenes que no respetan un orden jerárquico. Quien lo compró por primera vez por seiscientos ducados de oro fue Rodolfo II de Habsburgo, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, quien creía que era una obra del filósofo Roger Bacon, pero esto nunca se pudo probar científicamente.
El Manuscrito Voynich fue estudiado por innumerables especialistas en lingüística y criptografía, pero nadie logró descifrar absolutamente nada, lo cual llegó a suscitar la idea de que era un engaño. Sin embargo, la lengua en la cual está escrito (que luego llamaron voynichés) cumple con reglas y estructuras de
todas las lenguas naturales conocidas, las cuales fueron enunciadas muchos siglos después, de modo que resulta
impensable que alguien haya creado un idioma aplicándolas.
En estos momentos, el manuscrito
descansa en la Biblioteca Beinecke de libros raros de la Universidad de Yale.
Si has leído El jardín de las hadas sin sueño, estos dibujos te van a interesar. ¿Reconoces alguna flor? |
wow se ve genial !
ResponderBorrarese libro sí que ha de oler a viejo XD
es mucho tiempo!
Siii, un montón =)
BorrarInmediatamente cuando vi el titulo de esta entrada pense en la saga de Esther Sanz... :) Debe ser muy interesante ese libro!
ResponderBorrarSi, exacto! Jajaja, debe serlo, si =)
BorrarTengo pendiente el libro del que hablas...y las flores me gustan mucho.
ResponderBorrarUn abrazo.
Si, te va a gustar la trilogía. =)
BorrarAbrazos.