[Reseña de Serie] La esclava blanca

La esclava blanca es otra serie que vi por Netflix, cuenta de una sola temporada, pero tiene sesenta y dos capítulos. Originalmente fue emitida por Caracol Televisión, Colombia, así que es el típico culebrón. La vimos con mi mamá, ambas somos fan de la serie Xica da silva, y solemos engancharnos fácilmente con este tipo de historias.

Nuestra protagonista, Victoria Quintero, era una bebe cuando la hacienda de sus padres fue incendiada. De allí la sacaron los esclavos, entre los que se crió, aprendiendo las tradiciones de África. Adoptada por Tomás y Lorenza, enamorada de Miguel, era feliz en el palenque, hasta que los encontraron los blancos, volvieron a esclavizar al pueblo y a ella la enviaron a un convento de clausura en España, en donde la reeducaron nuevamente para ser una damita.

Muchos años más tarde, sin olvidar sus orígenes, con una doble espiritualidad, Victoria logra volver a su tierra, bajo el disfraz de marquesa... comprometida con un hacendado esclavista, Nicolás Parreño, quien oculta muchos oscuros secretos. Junto con su amiga Remedios y el guapo Miguel, idearán un plan para liberar a los esclavos y llevar ante la justicia a Nicolás por sus incontables crímenes.

La esclava blanca sigue un hilo argumental bastante sencillo, con algunas formulas clásicas del culebrón, pero con una ambientación histórica muy cuidada. Tiene escenas subidas de tono y algunas muy crudas. Los castigos que les realizan a los esclavos dan calambre de solo mirarlos.

Cada personaje que entra en escena tiene su historia personal que se amolda a la línea principal. Así, nos iremos sorprendiendo de algunos giros imprevisibles y nos deleitaremos con un extenso final, en donde todos los puntos cerrarán correctamente. Y quiero darles un gran aplauso por ese final. Algo que suele molestarme mucho es que, después de mirar decenas de capítulos, las series cierren en menos de dos minutos todo. ¡No puede ser! Yo quiero enterarme de qué pasó con cada personaje, que por algo me he clavado todos los capítulos. Aquí tenemos ese fanservice, en un extenso final, que nos mostrará el destino de absolutamente todos los personajes, con un correcto y digno cierre para esta historia.

Una historia de amor muy bonita, con un gran elenco de buenos actores y paisajes que te cortan la respiración. Entretenida, para ver en familia, para disfrutar los domingos por la tarde. Eso sí, debido a la cantidad de actores, conviene verla seguido, para no olvidarse de nada y no tener dolores de cabeza intentando recordar quién es quién.