Antes de empezar a contarles mi vida poco amorosa, les haré una revisión de acontecimientos de vital importancia: se me rompió la computadora, me compraron una nueva, conseguí un trabajo provisional, vino una tormenta, me cortaron Internet, recién me lo devuelven hoy. Una desgracia, pero bueno, ustedes ya saben que tengo mala suerte.
Querido Diario es una nueva sección del blog, que sigue los pasos del tradicional EDUM (Espacio de un Martes), pero con contenido sumamente personal.
Por razones laborales, me veo obligada de abandonar la cómoda oficina para realizar encargos menores. Eso no sería ningún problema si yo no tuviera una tendencia suicida a perderme. Así que ahí andaba yo, en el medio de un barrio pobre junto a la ruta, tratando de encontrar con el gps la parada del colectivo (ese tipo de datos es muy difícil que lo tire en provincia).
Imagínenme caminando a orillas de la ruta, mirando hacia ambos lados sin saber a dónde ir, con el celular peligrosamente en la mano y un calor insoportable... Cuando del lado contrario, dobla un joven. Un chico que rápidamente fiche como "no chorro". Sí, porque cuando estoy en la calle, apurada y perdida, se activa mi instinto primario.
Me paro en la mitad de la ruta y miro... Miro insistentemente hacia el lado por donde venía caminando el flaco. Pero, no miraba al flaco, miraba la calle, tratando de orientarme (aquí es necesario aclarar que yo de lejos necesito lentes, lentes que nunca me hice).
El flaco, me mira. Lo ignoro. Sigo mirando para ahí y decido que esa parece ser la zona más céntrica del lugar. Comienzo a caminar hacia allá. El flaco me relojea (instinto primario: me quiere robar), de arriba a abajo. No sé qué habrá visto el tipo, seguramente estaba desesperado. Porque infla el pecho, se pone derecho y comienza a caminar raro. Yo sigo mirando y caminando para ahí.
En un momento, llegamos a la misma altura (parece problema matemático), el tipo me dice algo como "Hey" u "Hola" o un comentario así, bajito e indescifrable. Yo ni lo miré, porque siendo mujer (aunque no la más atractiva del mundo) uno se acostumbra a que los hombres nos digan cosas en la calle (no se debería, pero...).
Seguí unos pasos más y me dispuse a cruzar la ruta. Miro, obviamente, para los dos lados antes de cruzar. Y el flaco, que se dio vuelta para mirarme, me dice descaradamente (y seguro un poco ofendido): "Me vacilás". A lo cual (todavía instinto primario: ignóralo o te viola), le contesto de mala manera: "Pelotudo, estoy buscando la parada del 38". Ni giré para ver que respondía, me apresuré a correr y el tipo me dice casi gritando: "Está en la esquina".
Ahí me sentí un poco mal. Fui desubicada y el muchacho me trató bien. Pero, recuerden que estaba perdida, retrasada y con calor. Así que enfilé a la parada sin pensar más en el tipo. Tres minutos después, viene el colectivo, carga gente (yo incluida). Me siento en una de las ventanillas de los asientos solitarios (¿o es para solitarios?) y miro por la ventana.
¿Adivinan a quién veo? El tipo seguía caminando por la cuadra en la que yo estaba anteriormente, así que el colectivo lo comienza a pasar. Y ahí me di cuenta. El flaco estaba rebueno. Pero recontra. Al estilo que a mí me gustan. Mentalmente me estaba puteando a mí misma. Obviamente, me tildo mirándolo, porque... ¡me lo perdí y estaba como todo lo bueno en la vida!
Y esto es lo mejor: el tipo levanta la vista y me ve, me localiza en el colectivo mirándolo, pone la cara más graciosa del mundo y me grita: "¡Me estás jodiendo!". Y como ya la oportunidad se me había esfumado, sin un ápice de vergüenza (total ahí no me conocía nadie) le grito, sacando la cabeza por la ventanilla: "perdón, sos un bombón" (alargando la "o" en muchas "oooooo" y poniendo tonito dulce).
Jamás lo voy a volver a cruzar. Pero bueno, la vida quiso darme un amor de verano o tal vez cruzarme con mi príncipe azul como regalo de Navidad. Y yo prácticamente le di una patada a Santa Claus.
¿Te ha pasado alguna vez algo similar?
¿Por qué es tan difícil encontrar el amor?
¿Creen que es razonable abandonar mi vida y acampar en esa ruta?
♥