EDUM #94: Diez personajes que me recuerdan a alguien de la vida real

Hubo un tiempo en que los Martes me encantaban... Salía del trabajo temprano, pasaba por la heladería (sí, gorda y qué) y volvía a casa a escribir un EDUM. Después pasaron cosas, entre ellas que me despidieron, subí demasiados kilos y ahora los martes me traen malos recuerdos. Para esta sección hay que sacar un lado creativo que no tengo, así que se me complica mucho hacerla asidua. Pero bueno, en eso estamos, ¿no?

Esta sección se llama EDUM (Espacio de un Martes) ¿En qué consiste? En dejar a un lado las reseñas y demás publicaciones habituales del blog, para escribir sobre una consigna divertida.

Hoy les traigo la consigna: "Diez personajes que me recuerdan a alguien de la vida real". En el último EDUM vimos "Diez adaptaciones y otras tantas novedades".

Como bien dice el título, les contaré de diez personajes que me recuerdan a personas que conozco. Espero que nadie se ofenda... mucho. Jajajajajajajaja.

1) Calu y Fanny de Una chica a la antigua: Calu es una chica con mucho estilo, algo que siempre le digo admirada cada vez que la veo. Ella afirma que no se produce demasiado, que sale así a comprar. Ni que decir que yo espero que nadie me reconozca cuando salgo a comprar porque me veo más fiera que Maléfica. Mientras leía la novela y el personaje de la amiga coqueta y fashionera (de esa época) iba mostrando sus atuendos y arreglos de moda, no pude evitar pensar en el estilo de Calu (y yo de sentirme tan Polly). Reseña del libro.

2) Sol y Blue de The Raven Boys: Mi amiga Sol es una chica con muchas convicciones y frescura, con grandes ideales que, a pesar de su juventud (sí, yo me siento una vieja cuando estoy con ella) ve claramente. Me encanta tener grandes conversaciones con ellas y reflexionar sobre nuestras vidas. Mientras leía esta saga, algunas cosas que piensa Blue me hacían acordar a ella. Y una vez hecha la conexión, imposible romperla. Reseña del primer libro.

3) X y X con Simon y Baz de Carry On: Hay dos amigos bloggers, bueno, uno ya no es amigo (porque sí, a veces las relaciones se rompen) que no sé exactamente en qué andarán, pero tienen un vínculo muy hiper extra shippeable. Y aquí estoy yo para imaginármelos como Simon y Baz... Porque además, hay tantas cosas que tienen en común con los protagonistas ♥ No, daré data, porque repito, capaz son cosas mías. Pero les aseguro que ninguno es vampiro. Reseña de la novela.

4) Fede y Apolo de El oráculo oculto: Fede tiene una personalidad muy intensa, llena de energía (que siempre admiro, porque yo soy muy perezosa para todo) y desprende energía positiva. Cuando leía este inicio de saga de Rick Riordan, no podía parar de imaginarme a Fede en el papel de Apolo (explicaría muchas cosas). De todas formas, me pasa algo muy raro con Fede, y es que suelo imaginar narrándome el libro (me pasa igual con Meli). Reseña de la novela.

5) Fede y Spencer de Suite Scarlett: Repetimos a Fede, sí que no tengo tantos amigos con el mismo nombre (ni amigos en general). Esto está puesto en la reseña de Enero de 2017 y lo pongo textual aquí: Lo mejor de la novela es Spencer, el hermano de Scarlett. Simplemente lo adoré. En mi cabeza tenía la voz de uno de mis amigos (coffcoffFedecoffcoff) y me divertía muchísimo con todas sus payasadas. Fin del comunicado. Reseña del libro.

6) Andru y Roland de El viento por la cerradura: ¿Alguna vez tuviste un amigo que parece veinte años más viejo y más sabio? Pues yo tampoco, jajajaja. Pero Andru desempolva valores de otra época, pequeños gestos que hicieron que al principio no lo comprendiera como ahora lo hago. Mientras leía esta novela satélite de La torre oscura me imaginaba que formaba parte del katet de Andru. Reseña por aquí.

7) Meli y Lestat de El príncipe Lestat: Meli es una fanática de Anne Rice y cuándo salió este libro no podía dejar de imaginar que la narradora era ella. Okey, locura aparte: Meli tenía el libro, pero no lo había leído, y yo sentía la necesidad de discutirlo con alguien, pero no podía decirle nada por miedo a spoilearla. ¡Fue muy frustrante! De ahí mi arranque de locura de imaginar que era ella quien narraba. Reseña de la novela.

8) Umberto Eco y yo De la estupidez a la locura: Vaya desfachatez compararse con alguien tan talentoso, pero me encanta imaginarme dentro de treinta años (o un poco más) comportándome como él en la calle: sin celular, atropellando a la gente y riéndome de todo el mundo. Sí, una de esas viejas de barrio que quisieras pasar por arriba con el auto por ser unas brujas. Que no estoy loca, che. Reseña del libro.

9) Mi vecino de al lado y Olly de Todo, Todo: A pesar de que odié esta novela (porque es pésima, no la lean), Olly se fue convirtiendo poco a poco en mi vecino. Mi sexy, motoquero y rubio vecino. Que está pa' dadle amo' y cariñito. El muy sinvergüenza no me da ni la hora (obviamente, quién se fijaría en semejante bagallo) y todos los días se trae a una chica distinta. Es nada más sentir el rugido de la moto y la risa tonta de alguna ingenua. Van cinco años que lo tengo al lado, jamás tuvo una relación más larga que dos semanas. No es que lo ande acosando, pero... Reseña del libro.

10) Mi papá y Charlie de Crepúsculo: Una relación difícil, no de malos tratos, sino de tratos escasos y a media palabra. Relación que la mayoría de hijos de padres divorciados tiene con alguno de sus progenitores. Pues bien, el personaje del padre de Bella siempre me hizo acordar a mi propio papá (sale lagrimón). No voy a entrar en más detalles, jajaja.

¿Son de relacionar libros y personas?

¿Amigos, enemigos o amores platónicos?