Bullet Journal y volver al papel

Partiendo del hecho de que hacer un Bullet Journal me parecía una terrible pelotudez (más que nada porque soy asidua a las agendas tradicionales y nunca tuve problemas con ello), se me metió en la cabeza el querer intentarlo. Pues bien, lo hice y me salió horrible (como lo presentía). Pero, no voy a escribirles una entrada despechada (aunque tengo ganas), sino que les dejo un pase "criollo" a este fenómeno que cautiva a todo el mundo y que hay que agradecerle a un tal Ryder Carroll

Para realizar un Bullet Journal necesitas un cuaderno y una lapicera... Ajá, si quieres que te salga algo bonito como las fotos que circulan, deberás tener más que eso y comprarte un cuaderno de páginas gruesas... ¡Pero no seamos detallistas!

Tienes que dividirlo en tres grandes partes: un índice, calendario y listas de tareas. Lo ideal sería que contaras las páginas del cuaderno y le dieras una correcta separación a las primeras dos partes. El índice es... bueno, un índice. El calendario funciona como el de una agenda común, pero al hacerlo tú mismo te puedes saltear los sábados y domingos (si no tienes nada importante en ellos) o los días que estés de vacaciones... o los meses en que nada ocurra. En las listas de tareas, donde pones todo lo importante (citas con chicos lindos, cierres de tarjetas, eventos literarios, etc.), puedes dividirlo en semanas o meses, como bien te guste.

Se recomienda hacer listas (a la gente le gusta hacer listas) con símbolos fácilmente identificables como: cuadrados para tareas, círculos para las citas y puntos para cosas de menor importancia. Pero, esto para cada cual como más guste, claro.

Esa monstruosidad es mía. Hasta que no terminé de completar el intento de Bullet Journal no me di cuenta de que soy una persona muy muy muy infantil. Pues bueno, lo soy. Y eso es lo que me salió. ¿Usé un cuaderno? Nope, adapté mi agenda. Es que durante años he usado agendas y estoy muy acostumbrada, además de que a mí me funciona... No necesito un "método" nuevo, soy feliz con el que tengo. Pero quería hacer esto, y lo hice.

El bullet journal tiene algo muy llamativo para los lectores: ¡es volver al papel! Así de sencillo. Pero tiene dos grandes dificultades: no tiene sistema de alertas y si escribes mucho se te puede pasar por alto lo importante; además, tienes que contabilizar bien las páginas, es engorroso migrar cosas de una lista a la otra; para que quede bonita necesitas más tiempo de lo convencional.

¿Quieres usar BJ? Pues bien, pero te recomiendo en vez de cuadernos comunes, utilices los que tienen anillas, más parecidas a las carpetas escolares. ¡Y que sean ligeros y pequeños para que puedan entrar en tu bolso o mochila! En Youtube encontrarás millones de vídeos... desde cómo elegir la bendita libreta hasta cual es la mejor forma de contar las páginas (os juro que no es broma). Todo eso me pareció un poco ridículo, pero aún así me senté a verlos =P

En fin, esta ha sido mi sección de #BulletJournal.

¿La has utilizado? ¿La conoces? ¿Te gusta?

¿Qué fue lo que hice mal?

No vale contestar toooodo.

=)