Desde hace unos años, cada vez que me toca escribir una de estas entradas sobre el aniversario de mi blog, me siento un poquito (bastante) angustiada. Allá por el 2017 el blog se veía y funcionaba en perfectas condiciones y eso que personalmente no andaba muy bien. Pero desde entonces no logro coordinar mis días, mis ganas y empiezo a posponer. Si ustedes supieran la cantidad de entradas en borradores, listas para publicar, pero que por algún motivo no salieron adelante... O la cantidad de anotaciones pegadas en los libros. ¡Las fotos que saqué, con todo armadito para publicar en Instagram! Soy un caos.
Por una parte, ¿siguen vivos los blogs en general? ¿Es solo el mío que está agonizando o a otra gente le pasa igual? Ya somos los ancianos bookinfluencers para los que ya nadie tiene tiempo. Y no puedo culparlos, porque soy una adicta a Tiktok y a sus mini videos donde nunca te muestran de qué libro hablan. ¿Se imaginarían que yo hiciera una reseña en el blog y no les pusiera de qué libro hablo? Se me fundía el lugar al otro día. No entiendo las modas, me pasaron por encima. Pero sigo disfrutando la lectura y eso me lleva a no querer cerrar este sitio.
Por otra parte, la razón que hizo que abriera el blog en 2012 sigue en pie. Cuando leo un libro que me emociona hasta las lágrimas, necesito compartirlo. Cuando compro entusiasmada la última novela del escritor famoso (son carísimos los precios hoy) y resulta ser una mierda, necesito gritarlo. Y cuando descubro una historia que me roba el aliento, necesito que ustedes la lean. Esa pasión sigue ahí y si bien me estado autorecetando una dosis diaria de Goodreads, no es lo mismo.
Mi comunidad está aquí. En los que me leen, en los que me siguen. En los blogs que leo, en los que sigo. Pero esta burbuja que teníamos estalló y ahora debemos adaptarnos o morir. Y me niego a ambas cosas.
Así que otro año se cumplió y ya van once. Once años online. Y les prometo que tendremos varios años más. Quizás no pueda darles todo lo que quiero darles. No será perfecto. No estaré todos los días conectada. Pero habrá NannyBooks por un buen rato más. Tendremos reseñas y comentarios varios (seguramente muchas quejas) y quizás no les interese en lo más mínimo. No importa, yo estaré aquí, por si deciden volver.