Una educación mortal de Naomi Novik

jueves, 7 de octubre de 2021


De la autora best seller de Un cuento oscuro y Un mundo helado llega la fascinante historia de una hechicera oscura destinada a reescribir las reglas de la magia.
Decidí que Orion Lake debía morir cuando me salvó la vida por segunda vez.
Todo el mundo adora Orion Lake. Todos los demás, quiero decir. Por mí puede meterse su rimbombante magia combativa por donde le quepa. No pienso unirme a su grupo de fervientes seguidores.
A diferencia del resto, yo no necesito la ayuda de nadie para sobrevivir a la Escolomancia. Olvídate de las hordas de monstruos de y los artefactos malditos: lo más probable es que no haya nada más peligroso en este colegio que yo. En cuanto te descuides, destruiré montañas, aniquilaré a millones de personas y me convertiré en la siniestra reina del mundo.
Al menos, eso es lo que todos esperan que haga. A la mayoría de los estudiantes les encantaría que Orion acabara conmigo igual que si fuera otra de las diabólicas criaturas que salen de los desagües. A veces pienso que quieren que me convierta en la bruja maléfica que creen que soy. El colegio, desde luego, lo está deseando.
Pero no voy a darle a la Escolomancia lo que quiere. Ni tampoco a Orion Lake. Tal vez nadie me considere la heroína perfecta, pero pienso salir de aquí con vida. Y sin provocar una masacre.
Aunque si estoy planteándome seriamente cargarme a cierta persona.
Naomi Novik ha creado con impecable destreza a una heroína para la posteridad; un personaje tan logrado y rico en matices que permanecerá en nuestro corazón y en nuestra mente durante mucho tiempo.
Escolomancia:
1) Una educación mortal
2) The last graduate
3) Título sin confirmar
Datos adicionales:
Ya a la venta
Umbriel
Ediciones Urano
352 páginas

Sobre la autora:


Naomi Novik (1973) es una escritora y programadora neoyorquina.
Una educación mortal es una novela de fantasía que nos presenta un colegio de magia muy diferente a los hermosos castillos medievales que tenemos en mente y en donde los jóvenes son motivados en un entorno seguro a desarrollar al máximo su potencial. En la Escolomancia, los alumnos están asustados todo el tiempo y tienen que andar con cuidado para no quedarse atascados en sus estudios o simplemente morir. Y eso es exactamente lo más interesante de toda la historia.

En el medio de esta escuela, nos encontramos con Galadriel (quien prefiere que la llamen El), una bruja con grandes habilidades para la destrucción masiva. Parece que su destino es convertirse en el enemigo público número uno, pero ella tiene otros planes. La narración en primera persona está a su cargo y nos contará un poco sobre su mundo con una gran carga de humor negro. Pero debido a la perspectiva elegida para la historia, solo nos enteraremos de lo que ella sabe del colegio, del sistema de magia y de las relaciones de poder entre los brujos. Hay un gran condimento político, una lucha por el poder, unas desigualdades, que son tratadas muy poco (aunque sí lo toca, de vez en cuando). ¿Qué puede hacer una joven bruja con una afinidad innata para el mal al respecto? Quizás veamos esto más adelante en el próximo libro... O quizás no, lo que sería una pena, pues la autora tiene mucho para desarrollar ahí.

Los personajes son interesantes, la premisa promete; aunque la construcción del mundo y de los monstruos aún no está muy desarrollada. Reitero que espero que tengamos mucha más información en los próximos libros, ya que Una educación mortal parece que será una trilogía. Lo que si nos queda bien claro desde el principio es el sistema de magia y el sistema de la escuela, tanto de la institución en sí, como de los tratos que realizan los estudiantes para sobrevivir.

La narración es atractiva y el ritmo muy ágil. La novela está llena de referencias a la cultura contemporánea y tiene un buen abanico de inclusión étnica (aunque no creo recordar representación LGBTQ+). No es como Harry Potter, a esta escuela vienen alumnos de todos lados. Se mencionan enclaves de Berlín, de Londres, de Nueva York, de India, etc. Y eso es realmente genial, especialmente porque la protagonista es de ascendencia india y habla varios idiomas como maratí, hindi, sánscrito, latín, alemán e inglés (este último el menos sorprendente).

A medida que leía la novela, me daba cuenta de que la historia no tiene un objetivo claro. Todo es construcción de personaje, del crecimiento de la protagonista y un poco de los personajes que la rodean (ya sea el héroe u otros). Pero, a pesar de esto, la aventura se disfruta mucho. Los pequeños sucesos que se van dando y se entrelazan para el gran acto final condimentan con un poco de acción estos meses escolares. No hay un enemigo en común único, un Lord Voldemort, no hay una lucha clara entre el bien y el mal, sino que es simplemente un proceso educativo con monstruos y peligros cada tanto. Pero, tanto El como Orión parecen todo el tiempo tan poderosos e imbatibles, que estas escenas pierden un poco del peligro que podrían representar para los personajes y no son tan llamativas. Esto casi casi que hace que el argumento se licue en algo más soso, pero el sistema de magia, la escuela (que es definitivamente genial) y la protagonista hacen que la historia nos enganche igual.

Además de la prota, el otro personaje que destaca es Orión. El héroe, el muchacho amable y solitario (de hermoso cabello blanco, suspiremos juntas) que sospecha que El es mala. Hay una relación un tanto antagónica entre ambos en las primeras páginas, pero no es un enemy to lovers, porque no son enemigos en realidad... Por ahora. Sí, se llevan mal. La prota lo maltrata un poco, pero en realidad, lo único que hace es bajarlo del caballo al tonto ese que se la pasa intentando matar a todos los monstruos sin pensar demasiado en los daños colaterales. La relación entre ambos me resultó muy tierna, ya que van cambiando sus actitudes despacio y finalmente logran comprenderse. O sea, que tampoco hay insta love. ¿Hay otros personajes interesantes? Sí, pero no puedo contarles mucho sin revelar nada de la trama.

En los últimos capítulos hay una escena de mucha acción, seguida de una escena tierna, seguida de una escena un poco extraña de educación sexual (completamente inesperada, porque no parecía el target). Esta última me descolocó un poco, pero creo que sirve para un propósito (y no, no es que los personajes tengan sexo, no hay escenas eróticas ni calientes en lo más mínimo). Pero, más allá de eso, el final que me gustó mucho, abrió una duda existencial que podría cambiar el rumbo de toda la historia abruptamente Ahora bien, cuando terminé el libro estaba super contenta y en modo fan enloquecida. Porque la última línea me generó una necesidad física que me hizo plantearme seriamente si me compraba la continuación en ebook en inglés en Amazon. Después de unas horas, sin embargo, me di cuenta de que la frase si bien cumplía su propósito de volver al lector un poco loco, carecía de sentido completamente. Y no se las puedo explicar acá, porque destripa todo, demasiado spoiler. Lo único que puedo decirles es que hace que un final que parecía bastante correcto y cerrado, de golpe quede abierto y con muchas preguntas sin contestar.

Una educación mortal es una novela con una historia interesante, con una narración que engancha, con buenos personajes. Tal vez merezca una puntuación más baja de la que le di, pero me gustó mucho y el final me dejó necesitando "físicamente" más. Me encanta este tipo de libros y me gustaría realmente ser alumna de una escuela así... Aunque intente matarme.

La plegaria de la calle de Gareth Hanrahan

domingo, 3 de octubre de 2021


En la ciudad de Guerdon tres ladrones han sido acusados de un crimen que no cometieron. Su búsqueda de venganza sacará a la luz oscuras verdades sobre la ciudad y una peligrosa conspiración, cuyas semillas se sembraron mucho antes de que ellos nacieran. 

En la profundidad de los túneles de la ciudad, se agita un malévolo poder y una guerra mágica de siglos de antigüedad está a punto de volver a desencadenarse.

Cari es una huérfana vagabunda cuyo pasado es más oscuro de lo que ella ha creído siempre. De ahora en adelante, su futuro estará fuera de control. Rata es un ghoul, y su especie ronda por el inframundo, alimentándose de los muertos de la ciudad. Spar es un hombre de piedra: sufre una terrible enfermedad que lentamente está petrificando su carne.  El azar los ha unido y su amistad podría ser lo único que se interponga en el camino de la destrucción total.
El legado del hierro negro:
1. La plegaria de la calle
2. El santo de la sombra
3. El dios caído
Datos adicionales:
Ya a la venta
Gamon
Trini Vergara Ediciones
Riverside Agency
528 páginas

Sobre el autor:

Ryder-Hanrahan Gareth es un escritor y diseñador de juegos irlandés.
La novela de fantasía La plegaria de la calle de Gareth Hanrahan es el inicio de una trilogía llamada El legado del hierro negro. Es el primer libro que ha escrito y con el que debuta en el mercado editorial, pero es muy conocido por sus juegos de rol. No tenía altas expectativas con esta lectura, realmente no sabía qué esperar ya que no conocía al autor y solo me dejé tentar por la sinopsis. Pero, hace unas horas que terminé de leer el libro y necesito contarles sobre el mismo, para resolver el gran misterio: ¿por qué no me terminó de gustar, si lo tenía todo para gustarme?

Empecemos por lo más sencillo: la historia. Tres amigos muy distintos (una joven humana, un muchacho que se está convirtiendo en piedra y un ghoul que se alimenta de gente muerta) son contratados para robar unos documentos en un edificio importante en la ciudad en la que viven. Pero algo sale mal, se separan y descubren que sus vidas, ya de por sí duras, se han enredado en traiciones políticas, mafia y delirios místicos.

Hay una muy buena construcción del mundo (tanto de la parte en donde sucederán los hechos, como de las naciones que bordean la historia y solo impactan de manera superficial), hay un excelente sistema de magia, de seres mágicos y de estratos sociales. Todo lo que es el entorno de la historia, sus bases, sus religiones (algunas loquísimas, pero fascinantes)  son muy sólidas y se nota la experiencia de Hanrahan en creaciones similares (como para The Laundry RPG). No hay absolutamente nada que pueda reprochársele al autor en este tema. Fue prolijo y minucioso, dejando pasajes de la historia de este mundo repartidos en diferentes momentos sin resultar abrumador. Debería comentarles el sistema religioso, el poder de las deidades, pero como es lo más interesante del libro, por si alguien que está leyendo esto quiere leer la obra, lo voy a omitir completamente. Solo decirles que no tiene desperdicio.

Los personajes siguen algunos patrones predecibles, pero te encariñas con ellos enseguida. Tienen personalidades muy diferentes y únicas. Spar es un mausoleo andante en honor a su padre, con normas morales bien fijas y deseos ocultos bajo capas de piedra. Me encantó su perspectiva, me dio mucha pena ciertos momentos difíciles que atraviesa debido a su enfermedad y hasta el final me estremecí con él. Spar es la única razón, por esa pregunta del epílogo, por la cual yo seguiría leyendo esta trilogía. Rata, en cambio, es una continua lucha entre sus instintos casi animales y lo poco que se puede humanizar de él. Es un personaje importante debido a que nos muestra un lado oscuro, subterráneo y antiguo de la ciudad. Sufre una transformación que no me esperaba en la última parte de la novela, me tomó por sorpresa, pero me gustó. Cari es quien tiene más protagonismo y es la más esquiva para querer. Una aventurera, una ladrona, una chica que no sigue las reglas y nunca está donde se espera. Sin embargo, resulta ser un personaje femenino atractivo, fuerte e interesante. Quizás un poco dependiente de sus pares masculinos. Hay otros personajes que podría nombrar como Miren, un joven que fue una incógnita algo molesta durante todo el libro, o Eladora, la prima de Cari, quien me cayó absolutamente mal en todo momento; pero solo quiero dar una mención especial a Jere, ¿por qué lo describen como viejo todo el tiempo si no llega a los cincuenta?. En los últimos capítulos, ese patrón del que les hablé en un comienzo, se hace presente y es fabuloso. Fue una de las mejores escenas de la novela.

Entonces, si la historia es interesante, la construcción del mundo (magia, seres, religiones, política) es excelente y los personajes son profundos... ¿Qué es lo que falló? Hanrahan eligió un narrador en tercera persona que utiliza el tiempo verbal presente para la novela. Esta técnica requiere de mucha pericia, porque aunque focaliza la atención con mucha más rapidez, también trae muchos riesgos. El problema más costoso de evitar es que las líneas temporales colapsen mientras se narra. Debido a que la novela es coral (esto quiere decir que tendremos por turnos diferentes focalizaciones en puntos de vista de un determinado número de personajes), a veces se narraba hechos en "presente", que ya eran "pasado". Esto ocasionaba un poco de confusión y también una pérdida de sorpresa. Les voy a dar un ejemplo levemente inspirado en la novela: Clarita nos cuenta que Manquito la está salvando, Pedrito nos cuenta que ve a Manquito en la escalera y le pide que vaya a salvar a Clarita; Manquito le dice que primero va a charlar con Olguito. ¿Se entiende el problema? Todo en presente, todo pasando en ese momento. Y no, la novela no va sobre viajes en el tiempo. Esto no quiere decir que el tiempo verbal no funcione para narrar, hay buenos libros escritos completamente en presente, pero es difícil. Acá no funciona, hay cortocircuitos. Sumado a esto, también se dificultaba diferenciar cuándo se cambiaba de punto de vista, ya que los mismos no están señalizados externamente, sino que hay que descubrirlo en la propia narración.

Me costó mucho llevar adelante la lectura, el ritmo y los eventos se empiezan a incrementar pasados el sesenta por ciento del libro. Esto hace que me frene mucho la idea de volver a leer algo del autor o de la trilogía en cuestión, cosa que me facilita enormemente ese final tan cerrado. Pero estas impresiones pueden ser algo completamente subjetivo, quizás otros lectores descubran a un nuevo George Martín en Hanrahan. Quizás me anime a darle una nueva oportunidad y me sumerja en la lectura de la continuación. No se los puedo asegurar. En estos momentos, solo sé que quiero escapar de esta historia. Yo no recomiendo esta lectura, a solo que sean amantes del género y estén a prueba de dagas narradas en presente.

Noveno Aniversario

viernes, 1 de octubre de 2021


Bienvenidos un año más a esta entrada semi reflexiva donde les recuerdo que aún el blog está abierto y que todavía sigo leyendo. Aunque actualmente estoy con un libro que se me hace cuesta arriba. Para variar un poco voy a dejarles nueve comentarios sobre temas un tanto extraños... Nueve porque son nueve años que cumple el blog, claro. Sí, así estamos hoy. Pero, che, no me olvidé del aniversario y hasta me compré una tarta de limón para festejar este día, algo es algo. Para el año que viene sí les prometo tirar la casa por la ventana. Bueno, ya está, fin del preámbulo:

  1. Estoy escribiendo menos porque detesto la nueva plataforma de Blogger. Se me complica mucho, casi todos los códigos que tenía en HTML los tuve que retocar para coincidieran y aún así saltan errores de vez en cuando (que espero que no noten). ¿Les conté que empecé a estudiar programación? Sí, lo sé, una locura a esta altura de mi vida.
  2. En mis estanterías dejé solo los libros que tengo pendientes para leer, como castigo guardé todos los demás libros (incluso mis favoritos y los que tenían post it). Y aunque parezca una locura o medio raro (ambas, lo sé) me está funcionando muy bien. Me es más fácil elegir lecturas, me tientan a pasar más tiempo leyendo y ya prioricé lo que sí o sí quiero tener leído para fin de año. Además, hay una cierta satisfacción al guardar el libro terminado en la caja... Es como si estuviera tachando una lista. Y no hay nada más satisfactorio que tachar cosas de una lista de pendientes.
  3. Estoy amando leer en el Kindle y me empiezan a dar pereza los libros impresos. Ya sé que es mucho más lindo tenerlos en físico, pero entre que ya no hay espacio en casa y que me estoy quedando chicata, encontré una comodidad inesperada a leer en digital. Además, ahora que ya trastoqué todo el Kindle y lo tengo como un esclavo, lo amo más fuerte cada día. ¿Les gustaría un tutorial sobre eso? Por cierto, si tienen que estudiar literatura y les da un verdadero escalofrío el solo pensar en rayar un libro o escribirle anotaciones, el ereader es la salvación, ya que permite hacer todo eso y más.
  4. Desde que estudié Bibliotecología, se me ponen los pelos de punta cuando veo a la gente maltratar libros... PERO, siento una satisfacción perversa al doblar mis propios libros mientras leo (ya sea abriéndolos hasta que el lomo se deforma, doblar las páginas para marcar la lectura o usar las solapas como señaladores hasta que estas se marcan y luego no se cierra bien el libro) ¿Por qué? Creo que es la tensión acumulada de tantas reglas sobre el cuidado en el uso y conservación. ¿Les está agarrando un ataque? Lean las recomendaciones para el cuidado de los libros que publiqué a principios de año.
  5. Tiré todos los señaladores (incluso aquellos que eran puramente decorativos). No los uso nunca y cuando utilizo uno es siempre el mismo. ¿Para qué tener más? ¿Acaso disfruto más la lectura cuando el señalador hace match con la tapa? Pelotudeces grandes como una casa que me importan la nada misma.
  6. Iba a comentarles que hace rato que no leo nada que esté de moda, pero me acabo de acordar de que me leí The Dare de Harley Laroux hace muy poquito. Aprovecho para decirles que no recomiendo esa lectura. Tampoco recomiendo Artemisa de Andy Weir ni Propiedad privada de Joanna Wylde y... Mierda, leí un montón de malos libros este año. Pero miremos el lado positivo... *Voltea y no hay nada*
  7. Voy a reconocer que la literatura de romance siempre me saca de los parones de lectura (es un parón, porque yo paro, no porque un estado mágico me perturbe y haga que pase un mes sin que ningún libro me llame la atención; es que no me dan ganas y punto). Especialmente la lectura de romance histórico, porque siguen más o menos una estructura esperada, por lo cual me es fácil conectar con todo. En cambio, intentar salir de un parón con un libro tipo *inserte cualquier otro género aquí* hace que me cueste más retomar el hábito.
  8. ¿Sabían que el blog tiene publicadas más de tres mil cuatrocientas entradas? ¿Cómo es que escribí tanto? ¿Por qué nadie me paró? Corrección, Fede me paró, me dijo que era al pedo e incluso contraproducente. Hace cosa de un mes que vengo revisando las entradas, haciendo pequeñas correcciones y voy a tener que empezar a eliminar algunos artículos completos, porque están muy caducos.
  9. Quiero abran una nueva ventana o pestaña en el navegador y que googleen "Biblioteca Popular" y que seleccionen la biblioteca más cercana a sus casas (pueden atajar entrando a la página de la Conabip y utilizando su buscador). Muy bien, ahora que tienen una Biblioteca Popular seleccionada, quiero que la visiten y se asocien. Quiero que revisen su catálogo y que sin miedo le expliquen TODO lo que buscan en un libro al bibliotecario. Se van a maravillar con los tesoros que encontrarán. Y tranquis, el bibliotecario no te va a juzgar ni divulgar información sobre lo que leas (o sea, si no querés que en casa se enteren de lo que andas leyendo, es el lugar ideal). Además, hay muchas buenas razones para que te hagas mega amiguis del bibliotecario a cargo... especialmente cuando viene la hora de comprar libros y ellos tienen descuentos. No sé, se los dejo caer. El apoyo a cualquier biblioteca popular es un apoyo a toda la comunidad bibliotecaria. Acércate sin miedo, no mordemos (en algunos libros hay gente que muerde, pero te pueden tocar vegetarianos).
Y eso es todo, gente. Espero que les haya entretenido la entrada de hoy. Quería hacerla un poco diferente a lo de siempre. Les agradezco mucho que estén ahí, siento que los defraudo al no darles un sorteo, pero bueno, estoy pobre.

¡Muchas gracias por leer el blog!
Los quiero mucho mucho.
¿Qué les parece si organizamos un maratón?
Los leo *abrazos virtuales de oso cariñoso*